Abstract
El despido discriminatorio, el trabajo infantil, el acoso moral o el trabajo efectuado
en condiciones indignas, así como el trabajo no regularizado, son temas de profunda
preocupación en la sociedad que afectan los derechos fundamentales del ser humano.
El estado debe velar por el mejor desarrollo de las relaciones laborales a través del
fomento a la creación de empleo, como expresa el art. 14 bis de la Constitución Nacional:
“las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada
limitada...” como así también, mediante la continua adecuación de la legislación vigente,
teniendo en cuenta la realidad social imperante.
DESTACADO