Abstract
Es mucha la luz que, a casi 40 años de su finalización, debemos seguir echando
sobre la multiplicidad de conductas delictivas cometidas por la última dictadura que
sufrió la Argentina. El presente trabajo se propone analizar la innovación
jurisprudencial que implica entender los crímenes contra la libertad sexual como delitos
de lesa humanidad cuando se desarrollan en el marco de un ataque generalizado y
sistemático contra un sector de la población civil.
La violencia sexual es una de las principales formas que asume la violencia
política cuando es dirigida contra feminidades y disidencias sexo-genéricas. Además de
sufrir las mismas torturas y tormentos que los detenidos varones, las mujeres víctimas
de estos ataques se ven expuestas a la particular vulneración de sus cuerpos que se les
reserva en razón de su género: la expropiación de la libertad sexual como forma de
disciplinamiento social.
DESTACADO