Abstract
El propósito de este trabajo es analizar la influencia de un programa de educación emocional en alumnos de cuarto grado con problemas de convivencia. Es por ello que se pondrá en práctica un taller de 12 semanas de duración, en el que se trabajará con alumnos y docentes para intentar dotarlos de las competencias y recursos internos que les permitan, por un lado, identificar las reacciones habituales a los agentes estresores y, por otro, su adecuado afrontamiento. La adquisición de estas competencias permitirá que el estrés habitual no acabe derivando en sentimientos de continua insatisfacción, cuadros de ansiedad e incluso depresión, repercutiendo en su vida profesional, personal y social.