Abstract
Este caso aborda la compensación económica solicitada por una mujer tras el divorcio. La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, al aplicar una perspectiva de género, reconoció la dedicación personal de la mujer a la familia como factor de desequilibrio económico. Aunque la primera instancia rechazó la demanda por requisitos formales, la apelación llevó a la revisión del caso y la consecuente aplicación de la compensación. El problema central reside en la dificultad de probar el desequilibrio económico derivado de la tradicional división de roles de género en el matrimonio. El análisis se centrará en la valoración de pruebas desde una perspectiva de género, explorando el repaso procesal, el marco conceptual y reflexiones personales para llegar a conclusiones finales.