Abstract
En Argentina, existe un elevado número de femicidios. Pese a la creación de leyes
tales como la Ley Micaela, la Ley de Protección Integral (26.485), la Ley de Género
(26.473), existe una tardía respuesta del sistema judicial y del Estado en su totalidad ante
el riesgo de las mujeres.
Por esto, en este último tiempo sentencias en donde contemplan la violencia de
género como un agravante para la condena y donde se la reconoce antes de que las
consecuencias sean alarmantes, fijan precedentes dignos de análisis.