Abstract
El fallo sentencia que la mujer transitó el proceso del parto desconociendo quién fue el/la
profesional que la asistió, sin poder acceder a las alternativas que pudieron haber tenido lugar
en ese trayecto. Como consecuencia de ello, quienes la asistieron decidieron por ella, a tal punto
que la mujer se encontró con un desenlace fatal no asumido emocional ni racionalmente, por
no haber sido acompañada en su singularidad. No obstante, luego se le negó la historia clínica
sin acceder a los restos en tiempo y forma.