El certificado de vivienda familiar creado por el decreto 358/2017 y los modos de adquirir el dominio. Prueba de la posesión y el instituto de la prescripción adquisitiva.
Abstract
La problemática que sufren las familias que habitan en asentamientos y villas tiene una doble faz; por un lado, la cuestión del hábitat dada por la falta de acceso a los servicios como el agua potable, cloacas, energía eléctrica, medios de transporte, y por el otro; la ausencia de seguridad en la tenencia al no contar con instrumento jurídico que certifique su situación habitacional.
Este fenómeno lleva décadas sin resolverse; sin embargo, la publicación del Decreto 358/2017 permitió crear el Registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana (RENABAP), reconociendo la existencia de éstos en todo el país y conformando por primera vez en la historia argentina una base de datos oficial con información georreferenciada. A su vez, la norma crea el certificado de vivienda familiar, instrumento que se otorga a los responsables de las viviendas.
Se entiende que el decreto habilita una posibilidad para poder aplicar el instituto de la prescripción adquisitiva -también llamada usucapión-, y así avanzar en el valor justicia hacia los sectores más vulnerados en sus derechos. Por lo tanto el presente trabajo final de graduación tendrá por objetivo analizar el certificado de vivienda familiar y determinar si constituye un nuevo elemento de prueba de la posesión. DESTACADO