Abstract
En la actualidad existen dos posturas jurisprudenciales respecto al pagaré de consumo. La primera sostiene que es un título dotado de la suficiencia necesaria para exigir el cumplimiento de una obligación. La segunda postula que al haber un auge respecto a la protección del consumidor a partir de la reforma constitucional de 1994 y la aparición de la Ley 24.240 de Defensa del Consumidor siendo la misma de orden público, es necesario replantear si al no cumplir con los requisitos exigidos por la mencionada ley convierte al pagaré de consumo en un título inhábil.