Abstract
El regalismo minero determina el origen de la propiedad minera y establece sus modos de disposición. En América fue el régimen implementado por la corona española y hasta hoy continua vigente. Este modelo dota de un amplio garantismo a los descubridores y concesionarios mineros, generando grandes desigualdades con las comunidades y gobiernos, situación de desigualdad para quienes deben ser los beneficiarios de su aprovechamiento.
En ese contexto, el presente trabajo cuestiona al régimen regaliano argentino, planteando argumentos que manifiestan la ineficacia del sistema respecto de las demandas del sector, generando un amplio marco de inseguridad jurídica.