La participación del fisco en los procesos concursales.

Abstract

La creciente presión fiscal ejercida, fundamentalmente sobre el sector productivo del país, ha empujado a este sector a refugiarse en circuitos informales de financiamiento y crédito que a la larga repercutieron negativamente en sus actividades. Esto, sumado a la extensa y compleja normativa vigente muchas veces coloca a los contribuyentes en una situación de “muerto civil” compeliéndolos, para regularizar su situación a recurrir a un procedimiento concursal en el que podrá buscar la justa y correcta determinación de su pasivo y además en ese marco buscar una solución no solo para la propia continuidad empresaria sino también para todos los actores del proceso productivo. En ese marco quien aparece, muchas veces, como originante de esa situación de impotencia económica financiera lejos de promover o facilitar la regularización de la actividad, con todo lo que ello implica (puestos de trabajo, recursos financieros, etc.) comienza a jugar un papel condicionante de una posible solución haciendo prevalecer la finalidad recaudatoria por sobre el bienestar general. Ante esta coyuntura y para este trabajo distinguiremos tres cuestiones o momentos que tienen una importancia fundamental en este análisis y que entendemos deben ser precisa y correctamente legislados. La primera cuestión está dada por la obligación del fisco de insinuar su crédito, situación en la que se encuentra en exacta igualdad de condiciones con el resto del universo de los acreedores. La segunda cuestión está dada por las atribuciones punitivas y desalentadoras de la evasión canalizada por las altas tasas de interés, teniendo como contrapartida la facultad morigeradora de los jueces. La tercera y última cuestión es la consideración o no del fisco y sus acreencias para el cómputo de las mayorías necesarias para la obtención del acuerdo. Entendemos en este aspecto que el fisco carece de las atribuciones necesarias para ser considerado en un pie de igualdad con el resto de los acreedores. Entiendo que es vital una adecuada legislación y reglamentación de estos aspectos de modo tal que el fisco y sus acreencias no se transformen en un grave escollo para la recomposición económico financiera de cualquier actividad productiva.