Abstract
Nuestra vida cotidiana ya no puede entenderse sino como el producto de la modificación de nuestros usos y costumbres mediante las nuevas tecnologías de la información y comunicaciones. El resultado es la configuración de una sociedad de la información y el conocimiento que ocupa todos los espacios de nuestros días, requiriendo así la presencia y la regulación por parte del derecho.
El Derecho Informático llega entonces para regular las consecuencias jurídicas que la aparición de la computadora, la informática y el Internet trae a nuestro mundo moderno de la mano de sus novedosas herramientas, como lo son el documento electrónico y la firma digital.