El maltrato infantil intrafamiliar: el niño, la familia y la regulación interna.

Abstract

Todo ser humano posee derechos inherentes por su calidad de persona, entre ellos el derecho a conservar su vida, integridad física, emocional y sexual, en especial los niños y niñas, quienes deben ser protegidos por no poder defenderse por sí solos. El problema surge cuando quienes deben ser los principales protectores, son en realidad los agresores. Así como la familia es el núcleo principal de su desarrollo, donde sus derechos deberían ser respetados, también puede convertirse en su escuela de violencia. El maltrato infantil intrafamiliar es una problemática jurídicamente reprochable con consecuencias individuales, sociales, intermitentes y actuales. Deja secuelas negativas en la personalidad del menor, repercute en la sociedad y constituye uno de los principales motivos de generación y perpetuación de la violencia instaurada en nuestra cotidianidad. Existe un desconocimiento sobre la verdadera magnitud de la violencia familiar, especialmente aquella seguida de muerte. El Estado es quién protege los derechos de los niños y pone límites a la facultad de los padres en cuanto a la corrección y los medios seleccionados para llevarla a cabo. La tutela que ejerce lo hace mediante las normas, leyes y órganos especializados y dedicados a los menores. En el presente trabajo se pretende analizar si existe o no insuficiencia de normas para la protección de los derechos del niño en el ámbito familiar. Ningún ser humano tiene derecho a ser violentado física, psíquica o sexualmente, ni ser privado de su vida.