La necesidad de legislar las nuevas técnicas de reproducción asistida conforme los derechos fundamentales involucrados

Abstract

La vertiginosidad de los avances de la ciencia y la tecnología hacen que en muchas etapas de nuestra humanidad, el derecho pierda la ruta de la ciencia y le cueste acomodarse para dar respuesta a tantos interrogantes que antes eran impensables para el ser humano. Hoy nos encontramos frente a las Técnicas de Reproducción Asistidas (TRA) que ponen en juego el orden de prioridades, el quien debe decidirlo, y el como abordar los derechos humanos de los participantes: el derecho a la vida, a la integridad física, a la salud, a la intimidad, a la dignidad, a la personalidad, a la identidad, entre otros. Estos nuevos avances, este despertar a una nueva humanidad donde la reproducción humana deja de tener como única fuente el amor conyugal y las relaciones sexuales que se dan entre dos personas de sexo opuesto, deja abierta la puerta a la reproducción humana por medio de técnicas y grupos médicos especializados en dar vida sin necesidad de encuentro corporal entre dos persona de distinto sexo. Y aquí es donde se desajustan las estructuras clásicas de la filiación. La investigación de la paternidad queda vedada, la identidad del niño queda limitada por contrato, que por voluntad procreacional han firmado un contrato libre e informado para concretar sus deseos de procreación. Cómo lograr que la ciencia y el derecho se acompañen en el camino respetando en todo momento la dignidad humana y teniendo siempre como objetivo la tranquilidad de que formaremos un universo mejor a partir del hecho científico y el derecho humano a vivir en un mundo cada vez mejor.